Les traigo uno de los cócteles
más simples que pueden imaginar, pero
también es uno de los más deliciosos y románticos que existen.
Si estas preparando una cita romántica existen dos ingredientes que no
pueden faltar: las FRESAS y el CHAMPAGNE. Estos dos
ingredientes unidos pueden conseguir que la noche sea “perfecta”.
Y es que hablo por experiencia propia… Durante un viaje en París,
conocí a un matrimonio maravilloso dueños de un pequeño restaurante a un
costado de Notre Dame que, como buenos parisinos, el tema del romanticismo lo
llevaban a la máxima expresión. Así que después de una cena en Montmartre,
como punto final a la noche, ellos me prepararon el cóctel que les
traigo hoy: las fresas doradas. Intrigante nombre, ¿verdad?
La elaboración de este cóctel es muy simple y el resultado es realmente
fantástico, así que si tienen una cita o quieren sorprender a su pareja en una
ocasión especial, éste es el cóctel perfecto.
El champán siempre ha sido una bebida glamorosa, consumida de manera
habitual por las clases altas. Sin embargo, también se relaciona siempre con el
romanticismo y las ocasiones especiales, así que si quieres unir todos estos
detalles en un solo instante, ya sabes. La magia se encuentra siempre en el
sitio que nosotros queramos, así que esta es una buena manera de hacerlo. ¿Se
animan? Seguro que sí. Les prometo que los resultados serán inolvidables.
¿Qué se necesita?
- 1 botella de champán
- 2 copas de champán
- 8 FRESAS
¡A elaborar!
- Lo primero que tienen que hacer es lavar bien las fresas, muy
limpias. Dejarlas escurrir.
- A continuación preparen la licuadora y añadan las fresas enteras y
¾ partes de la botella de champán (si les gusta mucho, pueden echarle un
poco más).
- Licuar los ingredientes durante unos 10 segundos y servir el cóctel
en las copas.
- Para que la presentación sea espectacular, coloquen en un bol
algunas fresas más y pónganlo en una bandeja junto a la botella de champán
y las dos copas.
- Ya me contaran los resultados…
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